El estilo de crianza de las IGP´s Ternasco de Aragón y Ternera Gallega, donde el pastoreo juega un papel muy importante, es una de las características diferenciales en la producción de sus corderos y terneros.
Detrás de las IGP´s Ternasco de Aragón y Ternera Gallega se encuentra un producto de proximidad, medioambientalmente sostenible y que, además, ayuda a fijar la población en el medio rural. Veamos, a continuación, el importante papel que juega el pastoreo en ambos casos.
Las producciones amparadas bajo las IGP´s Ternasco de Aragón y Ternera Gallega se basan en el aprovechamiento de los recursos forrajeros locales, adaptándose a diferentes regiones mediante el pastoreo, uno de los sistemas alimentarios más sostenibles del planeta según un informe del Programa de las Naciones Unidas para el Ambiente y la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza. María Rosa Mosquera, catedrática del Departamento de Producción Vegetal y Proyectos de Ingeniería de la Universidad de Santiago de Compostela, manifiesta sobre el pastoreo que “contribuye a mitigar el cambio climático en la medida en que favorece la incorporación de carbono en el suelo y reduce las emisiones a través de la reducción del riesgo de incendios”. Es, sin duda, una actividad que juega un importante papel para el mantenimiento de los ecosistemas en los que tiene lugar.
El importante papel del pastoreo extensivo de ovino en Aragón y de vacuno en Galicia
Durante siglos, las ganaderías de ovino en Aragón y de vacuno en Galicia han sido los motores de la economía rural en estos territorios.
En el caso de la IGP Ternasco de Aragón, como ya os hemos contado en alguna ocasión, la crianza se realiza mediante un aprovechamiento tradicional y sostenible del territorio, tanto en pastos de montaña y media montaña como en las zonas más áridas del valle del Ebro. Estos suelos se benefician de las consecuencias positivas que sobre ellos ejerce el pastoreo sostenible, como ha demostrado el estudio ‘Ecología del pastoreo e interacción suelo-planta-herbívoro’ de la Universidad del País Vasco (UPV/EHU), que explica cómo esta actividad “favorece la diversidad vegetal y la eficiencia metabólica y funcional de los microorganismos del suelo».
En el caso de la IGP Ternera Gallega, las más de 7.800 ganaderías familiares con vacas madre inscritas que siguen sistemas de manejo tradicional mediante el pastoreo, ayudan a mantener los ecosistemas en donde pastan: tanto las praderías como los montes bajos y de arbolado, actuando como verdaderos agentes de prevención de incendios, manteniendo la biodiversidad y mitigando el cambio climático. Además, según la catedrática Mosquera, en los terrenos donde se practica el pastoreo “la producción de biomasa por unidad de superficie se eleva y se produce retorno económico a corto, medio y largo plazo”.
En ambos casos, el pastoreo juega un importante papel ya que ayuda a fijar población y a activar la economía en el medio rural.