Albarracín, un pueblo de cuento con una historia milenaria, declarado monumento nacional y, desde hace unos meses, nombrado el pueblo más bonito de España. ¿Os apetece conocerlo?
Albarracín es un pueblo turolense que está ubicado en la comarca Sierra de Albarracín, al suroeste de la provincia. Enclavado sobre una zona estratégica del río Guadalaviar, este pueblo milenario declarado monumento nacional y recientemente nombrado el pueblo más bonito de España, es el claro ejemplo de cómo una ciudad monumental ha sabido adaptarse a la historia y conservar la esencia de diferentes culturas.
De paseo por las calles de Albarracín
Albarracín es uno de esos lugares que invitan a pasear con calma, cámara en mano y sin prisas, para poder disfrutar de todos los detalles que esconde. Es una ciudad peatonal, de calles estrechas, que ofrece una gran cantidad de iconos patrimoniales, como las ruinas del Alcázar (castillo de origen árabe), las murallas erigidas tanto en la Edad Media (siglo XI) como en época Cristiana (siglo XIII – XIV), la torre del Andador (siglo X), el Palacio Episcopal (sede del museo diocesano local y edificio más importante de la ciudad), la catedral de San Salvador (siglo XVI) o la iglesia de Santa María.
Pero esta ciudad esconde otros muchos tesoros. Es el caso de la Casa de la Julianeta (siglo XIV), el edificio más emblemático de la arquitectura popular de Albarracín. Una estrecha casita construida a base de yeso y madera, que se levanta – casi sin espacio – entre dos calles que confluyen en ángulo agudo. La estrechez de su base, unida a sus irregularidades constructivas, convierten esta singular edificación en un símbolo de la ciudad.
Otro de los rincones que no hay que pasarse por alto es el Portal del Agua, situado en la zona sur de la ciudad. Se trata de un punto estratégico para el reino Taifa, debido a que era el lugar de acceso al río Guadalaviar. Una torre defensiva situada en un lado se erigió como protección.
No es de extrañar que se haya ganado el apelativo de “el pueblo más bonito de España”. El tono rojizo de sus edificios, unas estrechas y empedradas calles de singular belleza o las increíbles vistas del casco antiguo que se ofrecen desde lo más alto de las murallas e incluso desde el castillo, hacen de esta ciudad un lugar precioso, donde parece haberse detenido el tiempo.
Desde siempre, numerosos personajes han alabado la belleza de la ciudad de Albarracín. Es el caso del filósofo José Ortega y Gasset, quien la calificó como “La ciudad que lanza a las alturas su increíble perfil alucinado”, o José Martínez Ruíz “Azorín”, que lanzó la siguiente sentencia: “Visite una de las ciudades más bonitas de España, visite Albarracín”.
El Paisaje Protegido de los Pinares de Rodeno
Si Albarracín respira una singular belleza en cada rincón, sus proximidades no se quedan atrás. El Paisaje Protegido de los Pinares de Rodeno es uno de los lugares por excelencia. Un paisaje rojizo, que adapta su color a la luz de cada día, formado por un extenso pinar asentado sobre areniscas trabajadas por el viento y el agua hasta conseguir formas imposibles. Estas formaciones han convertido a este lugar en el reino de la escalada boulder en Europa. Una modalidad de escalada sin cuerda que se practica en bloques de roca, por la que visitan Albarracín numerosos amantes de este deporte venidos de todo el mundo.
Este paraje en el que se puede encontrar una rica flora y fauna, ya fue ocupado por el hombre prehistórico. Época de la que se conservan numerosas manifestaciones de arte rupestre levantino que forman parte del Patrimonio Natural de la Unesco.
La excelente gastronomía de la Sierra de Albarracín
La gastronomía de la zona tampoco se queda atrás. La sierra de Albarracín es un lugar con una extraordinaria riqueza micología dónde, además, se elaboran unos reconocidos quesos, se produce el inconfundible Jamón de Teruel DO y, como no, se cría el Ternasco de Aragón IGP, una de las señas de identidad de nuestra comunidad. ¡Os invitamos a disfrutar estos apetitosos bocados!
Ahora que ya sabéis un poquito más sobre Albarracín, el pueblo más bonito de España, os dejamos un pequeño vídeo para que disfrutéis de su belleza. Animaos a visitarlo, de verdad que merece la pena.
Si os ha gustado este paseo por Albarracín, no os perdáis otras localidades como Teruel, Mora de Rubielos o Rubielos de Mora. ¡Os sorprenderán!
*Desde el Club del Ternasco de Aragón queremos hacer una mención especial a la Fundación Santa María de Albarracín, por facilitarnos la visita al Alcázar.